El coronel fetichista, violador y asesino Russel Wiliams
miércoles, 20 de octubre de 2010
Uno de los oficiales con más futuro en las Fuerzas Aéreas canadienses se declara culpable de torturar, forzar y matar a dos mujeres
El coronel Russell Williams, de 47 años, era hasta febrero pasado uno de los oficiales más brillantes y con mejores perspectivas de futuro en las Fuerzas Aéreas canadienses. Apuesto, fornido y marcial. El clásico militar de pelo en pecho al que le sienta bien el uniforme.
Pero detrás de su impecable fachada escondía una personalidad sórdida: el perfil de un fetichista torturador, violador y asesino.
Los detalles revelados hoy por la fiscalía canadiense son dignos de un guión cinematográfico que no desdeñaría Quentin Tarantino. Engatusó a dos mujeres, a las que maniató, torturó durante horas, violó repetidas veces y finalmente estranguló. Y no olvidó fotografiar y grabar en vídeo la secuencia completa de sus «hazañas».
Durante el proceso que se le sigue en Belleville, a unos 180 kilómetro al este de Toronto, la fiscalía omitió las grabaciones por su crudeza. Pero las fotografías mostradas retratan al personaje. Rostro serio, casi pétreo, torso velludo, brazos musculosos, abdomen de gimnasio... vestido sólo con las prendas íntimas de sus víctimas, braguitas rojas, sujetadores negros, bodys verdes...
Williams admitió ante la sala haber torturado, violado y asesinado en noviembre de 2009 a la cabo Marie-France Comeau, de 38 años de edad, que servía bajo sus órdenes en la base aérea de Trenton; y a la joven Jessica Lloyd, de 27 años de edad, en enero pasado.
La violó durante dos horas
El fiscal Lee Burgess, que apenas pudo contener las lágrimas, relató a la sala que en el primer asesinato, el de la cabo Comeau, Williams irrumpió en su casa y, tras golpearla, la violó repetidamente durante dos horas. Comeau se resistió y escapó de habitación en habitación, pero el coronel la volvió a atar y amordazar, tapándole boca y nariz con cinta aislante hasta que murió.
Antes, la cabo Comeau le suplicó: «He sido realmente buena. Quiero vivir». Tras su muerte, Williams siguió grabando vídeo y tomando fotografías de la militar. En su ordenador personal, donde el coronel guardaba minuciosos detalles de cada uno de sus delitos, la policía encontró una carta que mandó al padre de Comeau para expresarle sus condolencias.
La obligó a posar para él
Dos meses después, Williams siguió el mismo ritual con Jessica Lloyd. Tras irrumpir en su casa por la noche, el coronel dominó a la joven y la maniató con cinta aislante. La obligó a posar para él en ropa interior y la violó repetidamente. Posteriormente, Williams se la llevó a una de sus casas, donde la joven Lloyd sufrió convulsiones y pidió ser llevada a un hospital.
Según el fiscal, Lloyd suplicó a su asesino: «Si muero, ¿se asegurará de que mi madre sepa que la quiero?». Poco después Williams la golpeó en la cabeza y la asfixió con una cuerda hasta que murió.
Mañana, la fiscalía mostrará la confesión en vídeo que ofreció Williams tras ser detenido el pasado 7 de febrero. Se espera que a finales de esta semana sea condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional en 25 años, la máxima pena que permite la Constitución canadiense.
El coronel Russell Williams, jefe de la base aérea de Trenton, una de las más importantes de Canadá, ha servido como piloto del primer ministro y de importantes personalidades en visita oficial, como fue el caso de la Reina Isabel II. Tan «brillante» oficial ha confesado también otros dos asaltos sexuales y el robo, en 82 domicilios particulares, de ropa interior y diversas prendas femeninas.
ACTUALIZACIÓN
Sentencian a cadena perpetua a coronel canadiense por asesinatos y violaciones.
22 de octubre de 2010
BELLEVILLE, Canadá, 21 de octubre (AFP).- El ex comandante de la mayor base aérea de Canadá fue condenado este jueves a cadena perpetua por los asesinatos de dos mujeres y por agresiones sexuales dignas de una película de terror.
Russel Williams, de 47 años, fue hallado culpable de más de 80 acusaciones, entre ellas asesinatos con premeditación, agresiones sexuales y entradas violentas a los hogares de varias mujeres que residían en las cercanías de la base de Trenton (Ontario, centro) que él dirigía hasta su arresto en febrero.
La Corte Superior de Ontario lo condenó a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional antes de 25 años. El militar, que se declaró culpable, es "un hombre enfermo y peligroso", declaró el juez Robert Scott.
LE QUITARAN SU CARGO
Tras el veredicto, las fuerzas armadas anunciaron que destituirán de su grado al coronel, y que le retirarán todas sus medallas militares.
Soldado con una foja de servicios hasta ahora ejemplar, Williams había piloteado el avión que transportó a la reina Isabel II durante una visita a Canadá. Pero este hombre, casado desde hace casi 20 años, era en realidad uno de los predadores sexuales más violentos de la historia canadiense.
"Es un asunto horroroso", dijo el primer ministro canadiense Stephen Harper durante una conferencia de prensa. Agregó que las tropas habían sido "traicionadas" y aseguró que el Ministerio de Defensa tomaría "todas las sanciones posibles".
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Es increible a quien confiamos y damos armas para que nos cuiden y resiltan ser nuestros torturadores
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